¿Qué pasa con la hipoteca tras el divorcio?

Normalmente, en los divorcios con hijos y con una vivienda con hipoteca, es el cónyuge que asume la custodia de los hijos el que se queda en la vivienda.

Sin embargo, cabe destacar que este no tiene que asumir el pago total de la hipoteca, sino que el Tribunal Supremo indica que ambos miembros deben pagar el préstamo hipotecario por igual. Independientemente de quién viva en el inmueble. La excepción la encontramos únicamente cuando uno de la pareja figura como titular único de la vivienda, y a su vez, es el único deudor hipotecario.

Para cambiar la titularidad de una hipoteca, ya sea porque se haga una extinción de condominio o por cualquier otro motivo, el banco debe prestar su consentimiento, ya que, aunque en el convenio regulador se pacte que uno de los cónyuges debe pagar el 100% de la hipoteca, si el banco no da el consentimiento de que figure en la escritura como único deudor ese cónyuge, si se deja de pagar la hipoteca, el banco podrá reclamar la deuda a ambos cónyuges, puesto que, dicho pacta de los cónyuges no afecta al banco.

Por consiguiente, después de un divorcio pueden acontecer varios escenarios:

1. Que se acuerde que la hipoteca se seguirá abonando al 50%.
2. Que se acuerde que la hipoteca la abona al 100% uno de los cónyuges, teniendo claro que mientras figuren los dos cónyuges como deudores hipotecarios el banco podrá reclamar la deuda a ambos en caso de impago.

También, salvo pacto en contrario, una vez se venda la vivienda el cónyuge que ha estado pagando el 100% de la hipoteca tiene un derecho de crédito frente al otro cónyuge por ese otro 50% que ha estado pagando. ¿Qué te ha parecido? Si te encuentras en esta situación y tienes alguna duda más o prefieres un asesoramiento más personalizado, en Legis Nova Abogados contamos con abogados experimentados y especializados en divorcios que podrán ayudarte a resolver tu situación.